El gobierno del P.P. la llama Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, pero nada de eso. No es más que una ley perpetrada por el Partido Popular de Rajoy y su ministro del interior, el mismo Jorge Fernandez Díaz, para amenazar y reprimir las protestas sociales. Una ley contra los derechos humanos, la democracia y contra las libertades y derechos fundamentales de la sociedad española. Hoy ha sido aprobada con sólo los votos del Partido Popular y en contra de todos los partidos de la oposición y la inmensa mayoría de los españoles.